Motel Destino: La vida a contracorriente Orlando Mora “Es mejor ver una mala película de un buen director que una buena película de uno malo”. Cito de memoria y seguramente de forma imprecisa la frase de uno de los realizadores de la Nueva Ola Francesa, cuando con el fervor y la iracundia propia de los jóvenes predicaba su teoría de que el cine tiene autores y que ese autor es el director. Con base en ese criterio de autoría establecieron sus preferencias, inclinadas en favor de los directores en cuyas obras, más allá de variables de temas y de géneros, eran reconocibles unos trazos que los diferenciaban de otros que eran hábiles e inspirados artesanos más que otra cosa. En el panteón de sus admirados reinaban gentes como John Ford, Nicholas Ray o Alfred Hitchcock. La teoría del cine de autor tuvo desde el comienzo sus contradictores, y también conviene recordar que la radicalidad de la postura inicial de sus promotores se fue morigerando en el tiempo, confrontada con la realidad i
Isla perdida: Las sombras del pasado Orlando Mora El estreno comercial de una película de Fernando Trueba será siempre una buena noticia para la cinefilia. Por edad y por trayectoria el español es una de las voces cimeras del cine de su país, con títulos que enorgullecen y distinciones tan relevantes como un Oso de Plata en Berlín, varios Goyas en España y un Oscar a mejor película extranjera en 1993 por Belle Epoque. Mucha agua ha corrido desde aquel lejano 1980, cuando debutó en el largometraje con un filme llamado justamente Opera Prima , una obra fresca e inteligente que se inscribía en el ambiente de libertad y desenfado que se vivía en esos primeros años de la España posfranquista. Nombres como Pedro Almodóvar, Fernando Colomo y otros fueron sus compañeros de lucha en el esfuerzo por brindar testimonio de esa nueva modernidad nacional. Por supuesto que las cosas han cambiado sustancialmente desde esos remotos días. Hoy su hijo Jonás sorprende gratamente a la cabez